904 “LA CHISPA”
Lema:
“En la indolencia cívica del ciudadano, se fundamentan los abusos del Poder”
IRÁN, ISRAEL Y COREA DEL NORTE
La identificación de occidente con
Israel es el resultado no solo de la cuestión religiosa, sino de una meticulosa
campaña publicitaria orquestada en casi toda la prensa mundial, pero sobre
todo, desde el enclave israelita en el corazón de Estados Unidos: Hollywood. Ese pequeño Estado sionista dentro de USA, ha
tenido más influencia que la Biblia y sus derivados en la formación de la
opinión pública acerca de cualquier asunto.
En centenares, talvez miles de películas tendenciosas en donde se
acomoda la historia al gusto del “pueblo elegido” y los grandes estudios, se ha
creado una particular versión de la verdad histórica, siempre favorable
a la raza hebrea. Es allí donde se ha estereotipado la
personalidad conveniente del pueblo
árabe como gente brutal, asesina, terrorista, fea, gritona, peluda e incapaz de
ajustarse a ningún modelo social culto y digno de alguna consideración. Pero lo que es peor, creyentes en una
religión fanática y enemiga de toda forma de civilización que los hace odiar
visceralmente a la cultura judeo-cristiana.
Esa caricatura del árabe creada en Hollywood, es la única imagen que se
tiene de esa multitud de pueblos. La
misma que han hecho de los negros y latinos y, todavía, de los malos alemanes. Gente salvaje e inútil que no merece respeto
alguno y que bien puede ser eliminada. Y
aunque los iraníes NO son árabes, se
encuentran dentro del mismo canasto debido a que profesan la religión musulmana. Además, ellos constituyen el último peligro
bélico que necesita ser eliminado para que se complete la hegemonía judaica
sobre el Próximo y Medio Oriente.
Por el contrario, la visión que se
ha generado desde la Meca del cine acerca del judío es de una belleza idílica:
son víctimas inocentes del antisemitismo y cuanta maldad se les ha ocurrido a
los goyim; especialmente a Hitler. Ellos
son sufridos, despreciados por los blancos, marginados, buenos, humildes,
trabajadores, honestos, pacifistas, fieles creyentes en Yavé y la Torá. En fin, el súmmum de la bondad, tolerancia, fraternidad, altruismo,
solidaridad, inteligencia,
desprendimiento y capacidad de perdón. Son
los ganadores eternos de los Nobel y
los Óscares.
Corea
del norte no les importa mucho, pues está muy lejos para representar un
peligro militar para ellos; además, para eso tienen acuartelados por allí a
miles de gringos dispuestos a morir
con tal de preservar la integridad del “pueblo
elegido”. Los contribuyentes gringos
pagan esa seguridad, con tal de seguir gozando de la protección que el dios de
Abraham les proporciona por dejar que los judíos hagan lo que les da la gana en
Estados Unidos y cualquier parte del mundo.
Sin embargo, eso no obsta para que sigan empecinados (en silencio) en
que ese país asiático “debe desarmarse” para que pueda ser bombardeado a placer
cuando a occidente se le ocurra que así debe ser. Ya sabemos que los pretextos abundan, sean
creíbles o no. Si vuelven a utilizar el
argumento de las “armas de destrucción
masiva” que usaron en contra de Irak, la gente se lo vuelve a creer. O que Corea es la base general de Al Qaeda y
que le da alojamiento a Bin Ladden. Que
Corea e Irán tengan bombas atómicas es un peligro para la humanidad y deben ser
aniquilados. Pero que Israel tenga decenas
de bombas atómicas de la mejor tecnología que le ha proporcionado los Estados
Unidos es normal, pues ellos son
parte de los buenos, del benévolo occidente
garante de la paz mundial y de la justicia absoluta. Israel tiene el mejor y más moderno escudo de
misiles anti-misiles. Además, los más
poderosos y mortíferos cohetes atómicos; pero solo son de carácter “defensivo”. Tienen la
fuerza aérea más moderna y destructiva de toda la región, capaz de alcanzar
y destruir todo el próximo y medio oriente; pero solo es “defensiva”.
Judea cuenta con el mejor y más
grande ejército del área, pero solo es “defensivo”; únicamente para hacer
añicos a los palestinos o al Líbano.
Para los compromisos más serios, disponen de sus subordinados
norteamericanos. Ellos sacan las
castañas del fuego con las manos del gato yanqui, como hicieron con Irak, que
sí representaba un enemigo formidable para Israel. También quieren hacer lo mismo con Irán, pero
con las garras del gato gringo. “El pueblo elegido” cuenta con una gran
flota de submarinos nucleares (SLBM)
que le ha sido proporcionada por Alemania,
al cobijo de tratados secretos impuestos por la canciller “alemana” Merkel (Rebeca Kasner) Y nadie dice nada ni consideran eso como un
peligro. Israel es una potencia nuclear
y con la plena disposición de masacrar a quien sea. Esta gente ha demostrado su grado de
criminalidad y menosprecio por la vida de quien sea, especialmente por la de
los árabes, y nadie dice nada. A casi
todos les parece normal que esa gente tenga semejante armamento y, además, dan
por un hecho que tienen la suficiente madurez para no utilizarlo a la ligera. Pero por otro lado, consideran que Irán NO debe tener su propio arsenal atómico, a pesar de las reiteradas
amenazas que le ha hecho Jerusalén, y de todo el acoso de occidente. Tampoco aceptan que Corea tenga sus bombitas porque son “los malos” de esa región.
Pero Taiwán podría tenerlas; de hecho, allí, como en Japón, Corea del
Sur y otros sitios del área, hay infinidad de misiles amenazando el corazón de
China y Rusia. Pero eso no importa, porque se trata de una
amenaza de “los buenos”.
¿Qué pasaría
si Rusia o China le proveyeran a
Irán, Corea, Cuba, Egipto o Venezuela un escudo misilístico capaz de nulificar
cualquier amenaza de las armadas o fuerza aérea norteamericana? ¿Qué tal si dotaran a Irán de ICBMs con capacidad para alcanzar el
territorio de USA? ¿Qué dirían si China le vendiera a Corea o
Venezuela una flota de submarinos nucleares capaces de ubicarse a 20 kilómetros de las
costas de Estados Unidos? ¡Se consideraría inadmisible! Pero Israel tiene todo ese poderío, y a los
gobiernos de occidente les parece normal e incluso necesario. Pero ¿qué opinan los del otro lado? Entonces,
¿lo que es bueno para el ganso judío NO
lo es para las gansas árabes, iraníes o coreanas? Desde el punto de vista de la identificación
racial, económica, política o
religiosa de occidente, el sistema actual de distribución del poder militar
parece adecuado; pero es seguro que no es así para los otros. No es aceptable que un solo país (USA) defensor oficioso de los intereses
judíos, se pasee por todo el mundo con sus armadas intimidando pueblos,
condicionando políticas, apropiándose de recursos ajenos, aniquilando naciones
enteras (Afganistán e Irak). No es correcto
que una nación se crea con el derecho exclusivo de adueñarse de lo ajeno
simplemente porque cuentan con la fuerza necesaria. No es tolerable que un grupo de países
explotadores y abusivos, se atribuya el derecho de calificar la condición moral
de los demás. Europeos versus asiáticos… O negros… O latinos.
Si los ofensores tienen armas, las
víctimas también tienen el derecho
inalienable de tenerlas. Ante el enemigo
que amenaza, NADIE está obligado a
desarmarse y bajar la guardia. Nosotros también deberíamos tener nuestro cuetecitos, aunque solo sean de pólvora. (¿Qué piensan los demás tercermundistas?)
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