715 “LA CHISPA” (16 noviembre 2009)
Lema: “En la indolencia cívica del ciudadano, se fundamentan los abusos del Poder”
UN SISTEMA ESCOLAR MODERNO
Varias personas me han replicado o aprobado lo que dije en la “Chispa” anterior. ¡Qué dicha!, pues eso significa que hay interés. Algunos me preguntan que cómo se podría implementar una escuela de ese tamaño y alcances. Y yo les respondo que es muy fácil, solo es cuestión de que haya voluntad política y la determinación de hacerlo. Los detalles son materia de amanuenses, pero la esencia consiste en crear los mecanismos mediante los cuales toda persona de un país pueda ingresar al sistema. Ya existe el modelo en las Universidades a Distancia. Pero debe ser mucho más ágil y sin el formalismo, costos y burocratización en que estas han caído. Tiene que ser GRATIS y deberá bastar con registrarse para que sepan que la persona existe y que está interesada. En principio nada de fotos, firmas, pagos, compromisos de muerte ni nada de esas majaderías con las que intimidan a los aspirantes. Debe ser un sistema libre, en donde las personas escuchen y vean, “bajen” material didáctico de la red, estudien y soliciten exámenes que siempre estarán disponibles en cualquier momento del año. Solo bastará con que el alumno lo pida. Desde luego que cada “facultad” tendrá sus métodos de verificación para garantizar que la persona en realidad sabe; pero ese no será el objetivo principal.
Por ejemplo, bien puede existir una red centroamericana por medio de la Internet, en donde estén inscritas unas diez universidades (nacionales) que impartan todas las carreras imaginables que contribuyan al desarrollo. Deberá existir un Consejo Superior de Área que coordine y fije las políticas a seguir. Y como existen las televisoras estatales, estas deben trabajar de consuno con la red para ofrecer dos formas de impartir enseñanza. Y será ese Consejo el que dirija los programas de orientación hacia las carreras profesionales que el mercado demande, para evitar la saturación de profesionales en campos limitados. Debe intensificarse la valoración de las carreras intermedias para llenar ese enorme vacío que hay entre el peón y el profesional de cualquier actividad, de manera que la gente no crea, como ahora, que solo una licenciatura o doctorado los hace valiosos para ellos mismos y la sociedad. Hay infinidad de profesiones de nivel medio que son mucho más productivas que ser abogado o sociólogo; además, más útiles a la sociedad. Incluso, menos dañinas. Sin embargo, no deben existir los “tapones” en las carreras. Eso significa que se borraría esa escala jerárquica insuperable en las profesiones. Por ejemplo: la ingeniería civil. Esta empieza por el obrero, luego le sigue el albañil; después está el Maestro de obras y el topógrafo. Allí se rompe la cadena y se establece el enorme vacío entre esos operarios y el INGENIERO, el dios de la profesión a cuya cima NO pueden aspirar los de abajo.
Eso debe anularse de manera natural y técnica. El Sistema debe ofrecer una secuencia en esta carrera, de manera que no limite ni ponga un hasta aquí a nadie. Lo primero que se debe ofrecer es el grado de “Oficial Albañil. Después, el de “Maestro Constructor”. Posteriormente el de “Técnico en Ingeniería”. Y al final, el de “Ingeniero”, en todas las especialidades imaginables. Cualquier podrá quedarse toda la vida como “Maestro Constructor” si así le place, pero en el entendido de que puede seguir estudiando y llegar al límite superior de su profesión. Eso sería igualitario. Jingle político: “Nos preocupa la educación nacional”
Lo mismo sería aplicable a todas las profesiones, pues no es justo que una mujer se gradúe de enfermera y tenga que quedarse allí toda la vida porque no hay continuidad en los programas de la carrera médica. La enfermera solo es eso; en cambio, el doctor es alguien del Olimpo, una posición a la que no puede aspirar ese profesional intermedio. Es otro mundo, otra dimensión inalcanzable. Igual se haría en derecho, pedagogía, historia, economía y todas aquellas carreras que ofrecen las universidades. Se puede decir que ya tenemos la infraestructura necesaria: Universidades a Distancia, Internet y Televisoras Estatales. Muchos países cuentan con personal capaz con experiencia y muchos recursos didácticos. Solo es cuestión de ceñirse a la filosofía y espíritu de UNIVERSIDAD sin obstáculos, burocracia ni formalismos. Una enseñanza que abarque todos los sectores de la población a todas horas. Enseñanza sin barreras, fundamentada en el principio de que “algo” que se aprenda cada día, nos hace mejores y más útiles. Incluso se podrían impartir decenas de oficios y profesiones para viejos retirados; para que no se sientan inútiles y se conviertan en productivos desde sus casas. Curso para amas de casa atrapadas en su hogar por las responsabilidades de su condición. Lema: “Mamis a la escuela, cole y la U, sin salir de casa”. Como ver telenovelas, pero con utilidad.
¿Cuánto puede costar este sistema? ¡NADA!, si lo comparamos con el gasto de un programa formal de alfabetización a nivel regional con todo el aparato que este requiere: legiones de profesores que no tenemos, salarios, edificios, equipo, laboratorios, mantenimiento y mil cosas más. En este sistema, todo lo engorroso se lo encomendamos a las computadoras, y dejamos la parte sensible e imaginativa a ese personal cibernético capaz de atender los grandes y verdaderos problemas humanos que puedan surgir. Podríamos inaugurar cientos de universidades, colegios y escuelas en los sitios más remotos con solo una compu y un televisor. Imagínense lo que es tener tutores de la más alta categoría y de toda clase a nuestra disposición exclusiva, ¡y a la hora que nos permitan nuestras actividades de supervivencia! Y todo con un costo mínimo.
Esa es la idea básica: simple, sencilla, barata, posible, universal. Solo falta la voluntad política para ponerla en acción. Es el negocio más productivo que pueda haber, con la mínima inversión imaginable. La cultura es nuestro pasaporte hacia la verdadera independencia de nuestros países, a la riqueza material y a nuestra membresía del club de los países primer mundistas. La escuela tradicional se ha hecho artrítica, burocrática en extremo, carísima, limitada y limitante, inaccesible a las grandes masas y se ha convertido en una carrera de obstáculos insuperables para los gobiernos y pueblos. La maquinaria de la Enseñanza Pública está acorralada y varada en la América Latina. Está oxidada por la carcoma de la manipulación política y la falta de incentivos y resultados; casi se ha convertido en una fábrica de ciudadanos frustrados.
(¿Cree usted que esto sea posible en su país?)
RIS
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