308 “LA CHISPA”
Lema: “En la indolencia cívica del ciudadano, se
fundamentan los abusos del Poder”
EL PROGRAMA NUCLEAR DE COSTA
RICA
Ahora que los precios del petróleo
han llegado a los setenta y cinco dólares por barril, es hora de que tomemos
alguna decisión al respecto. Y como las
que sugerí en “Chispas” anteriores no tuvieron eco alguno, se me ocurre otra que
podría dar buenos dividendos: Costa Rica
debe iniciar de inmediato su programa nuclear con el enriquecimiento de
uranio y la fabricación de misiles de alcance intercontinental. Debemos hacer caso omiso del tratado de Tlatelolco y lanzarnos a la conquista
del átomo para ubicarnos en el exclusivo club de los poseedores de juegos de
pólvora termonucleares. Y como es casi
seguro que no nos dejen avanzar mucho en nuestras pretensiones, podemos formar
un berrinche como el de los coreanos del
norte, y demandar de las grandes potencias económicas que, a cambio de
desmantelar nuestro programa atómico (que sería puro bluff), deben
recompensarnos con unos cien mil barriles de petróleo por mes durante los
próximos dos siglos. Negocio redondo. No es mucho lo que se necesita: un complejo
de galerones cerrados, unos cuantos camiones viejos de bomberos. Como aquellos que los satélites de los Estados
Unidos retrataron en Irak, y que el señor Collin Powell declaró ante la ONU que eran de
descontaminación radiactiva.
Después de los sucesos del Próximo,
Medio y lejano Oriente, tenemos que llegar a la conclusión de que el
“blackmail” (chantaje) paga. En las
relaciones internacionales la honestidad y rectitud son estorbos que no
conducen a parte alguna; lo único que cuenta es la astucia, la capacidad de
engaño, la mimetización y hacerse el
difícil. La entrega total es síntoma de infantilismo diplomático que no merece
la menor consideración de parte de los Grandes; es algo así como el papel de la
esposa, la segura, la que se da por descontada. Debemos
mantenernos bajo el signo de la duda, como hacen las amantes que saben
serlo. Ese lirismo de nuestros gobiernos, en el cual nos declaramos
“demócratas” fieles y rendidos amigos de los Estados Unidos o de quien sea,
solo nos conduce a que nos consideren lambiscones de primera línea. Pueblos a los que tienen “seguros” para
formar cualquier COALICIÓN. Es por eso que junto con “el programa
nuclear”, debemos tomar una pose de “peligrosos” e imitar la actitud de Israel
frente a los gringos: jamás les dan mucha pelota, los tratan como si fueran sus
sirvientes y no permiten intromisión alguna de estos en los asuntos internos de
esa pequeña nación; aunque eso sí, todo el torrente monetario y tecnológico que
les hacen llegar. Una vez un Primer
Ministro de ese país le dijo al gobierno de USA: “Israel NO es una Banana Republic, así que ustedes no pueden venir a
dictarnos qué hacer, como lo hacen con aquellos”. Excelente ejemplo que deberíamos
imitar. Y cuando se dio la guerra última
contra Irak, tampoco permitieron tropas norteamericanas en su suelo. “Si
quieren darnos armas y misiles antimisiles, bienvenidos sean; pero las
utilizamos nosotros; ni siquiera necesitamos instructores”. Eso se llama independencia real.
Pakistán era el chico malo del
Medio Oriente, en la lista negra de USA y con una deuda impagable; además, se
atrevió a entrar sin el permiso de los Grandes en club de los revienta-átomos. Su feroz y feo presidente, el señor
Musharraf, se encontraba en una precaria situación por los embargos y maniobras
político-militares que los gringos hacían en su contra. Pero gracias a Alá, se le dio la oportunidad
mejor que se pudiera haber imaginado. Y
la supieron aprovechar. Esa es la
política y las relaciones internacionales.
Cuando los Estados Unidos planeó la invasión de Afganistán como paso
previo a la de Irak, necesitaba una vía de acceso aéreo a la tierra de los
Talibanes, y Pakistán le concedió el corredor necesario para la masacre de sus
hermanos de raza y religión.
¿Crueldad? No. Política.
De nuevo se abrieron los mercados de occidente a Pakistán, se le perdonó
la deuda de decenas de miles de millones de dólares, y se suspendieron todas
las sanciones decretadas en su contra por parte de los Estados Unidos. El malévolo Musharraf se purificó y pasó a
ser un aliado y buen amigo de USA en
la mesiánica tarea mundial de combatir el terrorismo donde quiera que este se
dé. Alá es grande y Mahoma su
Profeta. Alá y Yavé trabajando juntos en
una causa común.
Mientras Nicaragua fue “comunista”,
mereció toda la atención negativa y positiva de USA; incluso Costa Rica salió
beneficiada de las maniobras políticas y militares que se desencadenaron
alrededor de ese país. Pero pasado el
conflicto, cuando Nicaragua se hizo “demócrata” y se postró ante el yanqui como
una pordiosera más en busca de migajas, se hizo acreedora al más profundo
desprecio con el que estos ven a todos aquellos que se someten a su
vasallaje. Ahora Nicaragua es el país
más pobre de la América Latina,
y ni siquiera le queda el orgullo de ser rebelde; ni siquiera tiene
dignidad. Pasó a ser un cero a la
izquierda.
Tenemos, pues, excelentes ejemplos
en los extremos; pero el más reciente, claro y espectacular, es el de los enanitos
coreanos del Norte. Sin permitir las
inspecciones de occidente, pues ellos son tan adultos como los judíos, jamás
dieron su brazo a torcer y se salieron con la suya. Ahora recibirán millones de toneladas de
petróleo gratis con tal de que no sigan haciendo bombas atómicas. O que no lo sigan intentando. Corea del Norte es un peligro porque tiene
hambre y nada que perder; eso lo comprende muy bien el Japón, USA y los europeos. El camino está señalado claramente.
Entonces, es hora de que nosotros
también iniciemos nuestro programa de desarrollo nuclear y nos hagamos “los
interesantes”, como los judíos, iraníes y coreanos. Recuerden que más vale una “rajonada” a tiempo, que un billete de mil en
la bolsa. Quizás saquemos mejor
partido con una actitud insolente y altiva, que con la sumisión declarada bajo
la cual hemos vivido ante los Estados Unidos. Talvez
sea más productivo ser una amante esquiva que una esposa entregada y fiel. Es
probable que saquemos más de esto que del TLC.
Atómicamente
RIS E-mail: rhizaguirre@gmail.com
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