952 “LA CHISPA”
(19 abril 2012)
Lema: “En la indolencia cívica del
ciudadano, se fundamentan los abusos del Poder”
CONCLUSIONES SOBRE LA
MUERTE
Para especular acerca de la
posibilidad de vida en el más allá, tenemos que tomar alguna posición. Y una de ellas es elegir si solo somos
materia (materialismo), producto de una evolución ciega y sin principio rector
alguno. Algo así como las conclusiones
de la teoría del Big bang. Que somos el
resultado de un proceso aleatorio que se inició por su propia cuenta y que, sin
directriz conocida, sin objetivo mi método inteligente, nos ha conducido hasta
lo que somos ahora. Unos seres
físico-bioquímicos en los que, por casualidad, se desarrollaron la inteligencia y el pensamiento como
producto de reacciones químicas y alguna chispa eléctrica casual; también los
sentimientos y todas las facultades cerebrales que nos hacen reflexionar y
tener consciencia del “yo soy yo”. Esta
sería la posición atea, que niega la existencia de Dios y, por consecuencia, cualquier
obra de ese origen. Si solo somos
materia, con la muerte del cuerpo termina todo.
Parece un desperdicio.
Pero
si somos creyentes en una Deidad Suprema y que somos parte de su emanación
(“creación”), forzoso es admitir que somos seres espirituales, inmortales y parte de algo mucho más complejo
que la simple forma exterior. Que en
esencia, estamos formados de una substancia
imperecedera que es el epítome de eones de evolución inteligente y con
propósitos que, aunque fuera de nuestra comprensión actual, constituyen una urgencia
filosófica. Y sobre esta teoría de la
inmortalidad del espíritu que nos anima, y que es parte integral de esa
totalidad conocida como Dios, podemos especular acerca de lo que podría ser la
Vida después de la muerte del vehículo físico (cuerpo). Pero si somos “bigbanistas” toda conversación
sale sobrando, pues ahí no hay cabida alguna para los sentimientos, la ética o
la trascendencia, materia sobre la
que estamos tratando. Desde esa base, da lo
mismo morir o vivir y todo podría reducirse a un simple hedonismo como meta
única y última de cada hombre. Ateísmo
puro, basado en la negación del Principio
Rector Universal, y NO en el
rechazo de dioses tribales. Este último tipo
de ateísmo solo es ignorancia.
Limitación brutal del concepto de Infinito o Dios.
Para el creyente en la inmortalidad del
Hombre, entendiéndose este como un
agregado de cuerpo, alma, pensamiento y espíritu,
la vida post mortem no solo es
una especulación sino una necesidad filosófica para darle coherencia al sistema. Pero, ¿se puede demostrar mediante la fe la
existencia de esa Deidad cuya inmanencia en el Universo, es la piedra angular
de toda filosofía que acepte y respalde la espiritualidad del ser humano? La aceptación de ese Poder por siempre oculto, sin conexión directa ni personal con
ninguna criatura del infinito universo, es el requisito sine qua non para ser
creyente en la trascendencia del hombre.
Para creer en la vida post mortem, tenemos que creer en la inmortalidad
del Ego como parte integral de esa totalidad a la que llamamos Dios, aunque no
tengamos ni la menor idea de lo que este pueda ser. Es una teoría que se basa en la confianza y
la fe, pero no en la fe ciega (fanatismo) sino en la que se deriva de la
racionalización de las probabilidades.
También debemos tener presente que en este terreno, todas las exposiciones
se limitan al campo de la dialéctica, por lo tanto, NO podemos dar ni pedir demostraciones físicas. Ni el creyente ni el ateo pueden dar pruebas
de la existencia o no existencia de Dios.
Es una discusión que no se aclara ni con la muerte, pues cualquiera que
sea la realidad, no hay forma alguna de que los muertos nos la puedan
comunicar. Solo ellos saben la
respuesta. Si la hay…
Esas son las dos probables opciones:
la Nada de los ateos, o la vida indefinible de los creyentes. Y esta última tiene un abanico tan extenso de
posibilidades como religiones hay. Desde
las brutalmente materialistas y sensuales, como las más racionales que nos
proponen las religiones antiguas y el Ocultismo. Pero antes de continuar, es preciso hacer una
aclaración acerca del ateísmo. No
creer en dioses tribales o nacionales (Yavé, Odín, Alá, Thor, Zeus, Osiris o Teotihuacán.)
NO nos convierte en ateos. No creer
en Yavé y su parcialismo injusto y fúrico, NO
es ser ateo. Rechazar a este bárbaro
dios tribal es una obligación ética e intelectual que no constituye ateísmo
sino raciocinio elemental. La no
aceptación de Baal, Moloch, Ares o Anu, es solo la utilización del sentido
común, no ateísmo como concepto general.
Por desgracia, el “cristianismo” convirtió
a Yavé en Dios, y eso ha traído como consecuencia que haya gente (ateos)
que reniega de la Deidad por culpa del dios judío. Confundir
a Dios con Yavé, equivale a decir que Cronos es el Absoluto.
Si
somos parte de Dios, somos inmortales; por lo tanto, continuamos viviendo
después de la muerte de nuestro
cuerpo físico, el cual solo ha sido un vehículo del espíritu, Ego u hombre
inmortal. De ser así, no cabe discusión
alguna acerca de la vida después del final de nuestro vehículo material. El problema es que no tenemos memoria alguna
de esas existencias que, de acuerdo con la teoría general, hemos “vivido” una
infinidad de veces (reencarnación).
Tampoco podemos hacer anticipación de ella. Las razones para tal negativa a los humanos
son muy fáciles de entender: si no soportamos la carga de la vida presente con
sus remordimientos y consciencia del mal que hemos hecho, ¿se imaginan lo que
sería enfrentarnos a la suma de los “pecados” cometidos en unas cuatro o cinco
encarnaciones? Sería insoportable. Si no somos ateos y creemos en ese estado de
consciencia post mortem, “algo” debe haber allí para el sujeto desencarnado,
aunque solo sea un sueño, como suelen decir los que saben. Pero todo sería solo un estado mental:
infierno, purgatorio y cielo. Todo
estaría dentro de la mente del sujeto, sin existencia objetiva, pero muy real
para el que lo vive.
Es
seguro que usted tendrá sus teorías, pero, ¿SABE alguna respuesta?
Fraternalmente
RIS E-mail: rhizaguirre@gmail.com
Entrada al blog “LA CHISPA” http://lachispa2010.blogspot.com/
No hay comentarios:
Publicar un comentario