miércoles, 30 de mayo de 2012

967 La pureza racial


967    “LA CHISPA        

Lema: “En la indolencia cívica del ciudadano, se fundamentan los abusos del Poder”

LA PUREZA RACIAL
          
        Pero, ¿existe tal cosa?  ¿Y pureza en relación con qué?  Además, ¿qué cosa es una raza?  Esa pregunta nos fuerza a explicar qué es una raza y en qué se fundamenta esa taxonomía.  Y esto nos obliga a tratar de definir cuáles son las características físicas que nos confieren la “pertenencia” a alguna raza.  La más evidente es el color de la piel, lo cual nos lleva a la clásica pero turbia categorización cromática: negra, blanca, amarilla.  El que tiene la piel blanca, pertenece a la raza blanca; el negro, a la raza negra, y el amarillo, a la raza amarilla.  ¿Eso es todo?  ¡Claro que no!   La población humana tiene una variedad increíble de colores de piel, pues solo en los europeos (caucásicos o blancos) encontramos gente que oscila entre una piel oscura, casi negra, a los que son absolutamente blancos, casi rojos (suecos, noruegos etc.).  Eso sin olvidar a las hindúes que, con su piel morena oscura, pertenecen a la raza aria (“blanca”).  ¿Y qué hay de los trescientos o cuatrocientos millones de mestizos americanos, cuya variedad de colores cubre todo el espectro imaginable?  Y los asiáticos en realidad NO SON AMARILLOS.  Esa es una apreciación muy subjetiva de los europeos, pues la mayoría de esta gente son blancos y morenos.  NO HAY RAZA AMARILLA.  Como tampoco blanca.  Vean que esto es tan variable que para varias personas, un sujeto cualquiera puede ser moreno, morenito, moreno claro, blancuzco e incluso blanco.  Entonces, parece que el color no es un elemento muy preciso para determinar la pertenencia a una raza.  Un chino de color claro, un latino de color claro, e incluso un negro de color claro, bien podrían alegar su pertenencia a la raza “blanca”, pues como se dijo, hay gente de piel morena y oscura que se consideran blancos solo por la región geográfica en donde nacieron. 
         Para hablar de la pureza racial, parece que primero tenemos que definir qué es una raza, de manera inequívoca que no incluya prejuicios sociales o nacionalistas.  Porque muchas veces el “racismo” nada tiene que ver con la raza, sino con diversas patologías derivadas del chovinismo.  Y cuando tengamos bien definidas las características de cada raza (que no será el color), podemos intentar las comparaciones que determinen qué es lo que proporciona los elementos en los que se basa la discriminación racial.  Concepto que implica la supuesta superioridad de una determinada raza en un momento de la historia.  Pues recuerden que cuando los europeos eran cavernícolas salvajes, los hindúes tenían una civilización portentosa.  Mientras los ingleses eran salvajes, los morenos egipcios eran la gloria de la cultura mundial.  Cuando los autóctonos americanos creaban pirámides y observatorios astronómicos, los alemanes eras nómadas cubiertos de pieles de animales.  Entonces, el progreso material de un momento dado en la historia, NO DEBE ser un elemento definitorio en la clasificación de las razas ni, mucho menos, para establecer juicios racistas.  Salvo muy pocos grupos raciales, ninguna comunidad o país puede alegar pureza racial porque ni siquiera sabemos qué cosa es una raza ni en qué podría consistir su pureza.  ¿Condiciona el color de la piel la inteligencia?  ¿Es un negro más bruto que un blanco solo por el color del pellejo?  Ningún estudio certifica tal tontería.  ¿Sería la inteligencia signo de pureza racial?  ¿Y cómo se mide eso en toda una raza?
         ¿En relación con qué se establece la pureza de una raza?  Un negro sin mezcla (si eso fuera posible) es de una pureza racial absoluta.  Lo mismo que un hindú o un indio americano.  Su pureza es de cien por cien.  Lo mismo sería un chino o un mongol.  Es una cuestión de convencionalismo.  Y todo depende de lo que cada grupo estime como lo mejor de sus propios atributos.  Si yo soy rubio, blanco y de ojos azules o verdes, en eso consiste la pureza racial, en ser como yo.  Lo mismo es válido para el hindú, chino, negro, hotentote o piel roja.  Incluso para los mestizos americanos.  Otra cosa, implicaría la existencia de un patrón establecido por un poder superior (tal vez Dios) que hubiera señalado cuál es el prototipo de la especie humana y cuáles los atributos físicos que determinan la pertenencia a ese estándar.  Pero tal cosa NO EXISTE.  Ha sido cada grupo racial, en el apogeo de su poder social, militar, intelectual y económico, el que ha establecido las categorías raciales que, a su conveniencia, le parece que existen.   Y de hecho, se ha inventado toda una mitología al respecto, para justificar cualquier acción inmoral en contra de los grupos que previamente han sido etiquetados como impuros.  Los negros son brutos, cochinos, malos, feos y vagos; los latinos son brutos, vagos, bandidos, cochinos y desordenados.  Los chinos son cochinos.  Los judíos son malos, prestamistas, codiciosos, avaros y mataron a Jesucristo; además, son racistas.  Los blancos son inteligentes, bonitos, ordenados, emprendedores, trabajadores… Además, escribieron el manual.  Entonces, ser blanco es el ideal, es el prototipo escogido por Dios, según algunas religiones.  El hombre blanco representa la pureza racial, aunque nadie sepa qué cosa es esto.
         Ningún grupo tiene el derecho de considerarse prototipo, o pensar que sus logros materiales son la prueba de que su raza es superior y que esto se debe a la “pureza” de su sangre.  Ese disparate ha sido muy manoseado a través de la historia y está muy desacreditado.  Y como ni siquiera sabemos qué cosa es una raza, no tenemos derecho a suponer que ciertas características físicas externas, son suficientes elementos para hablar de pureza racial ni, mucho menos, de superioridad racial.  Se pueden hacer comparaciones económicas y culturales, pero estas no prueban nada en cuanto a esos dos factores que han sido la justificación de tantas injusticias.  Como la explotación de los indios, o el crimen de lesa humanidad en contra de los negros.  O como las actuales masacres en contra del mundo árabe, los cuales deben morir porque son de piel morena y tienen otra religión que no es la de los blancos.
                                                                                   (¿Usted qué opina?)
Fraternalmente
                                       Ricardo Izaguirre S.
Blog “Librería en Red”:    http://libreriaenred2010.blogspot.com/

        

  


                                                                                            

domingo, 27 de mayo de 2012

972 Somos Ameriñoles, NO españoles


972 “LA CHISPA     (26 mayo 2012)    DOMINICAL

Lema: “En la indolencia cívica del ciudadano, se fundamentan los abusos del Poder”                          
SOMOS  AMERIÑOLES  (No españoles)

Que quede muy claro que somos americanos a los que se nos entrenó (domesticó) para escribir en español, pero nosotros hablamos en Ameriñol, la variante americana de ese idioma europeo. Y si hablamos en Ameriñol, DEBEMOS ESCRIBIR en Ameriñol. Lo otro, es un absurdo: hablar en Ameriñol y escribir en Español.  Por 500 años se nos ha impuesto ese fraude, y nos hemos convertido en perros guardianes de la llamada “pureza del idioma”, como si eso nos importara un bledo.  TENEMOS EL DERECHO DE ESCRIBIR NUESTRO IDIOMA (el Ameriñol) de la forma como lo hablamos.  Eso no admite discusión.
¿Les ha tocado a alguno de ustedes escribir la frase de la historia de USA: “La guerra de secesión”?  ¿Y están seguros de cómo se hace?  Yo nunca he podido y siempre tengo dudas al hacerlo.  Como en todo el idioma, nunca estoy seguro de nada; siempre tengo MIEDO al escribir, el mismo pánico que sentía hace más de sesenta años cuando la maestra-o me hacía los famosos y terribles dictados.  ¿Será seseción, cecesión, sececión, cececión o sesezión?  Y así con miles de palabras.  Escribir en español es un martirio, incluso para los grandes escritores.  Siempre tienen que tener Diccionarios a la mano: el DRAE, de Sinónimos, Etimológico, etc.  Entre nosotros, escribir es una TORTURA; y escribir como oficio, una infame labor masoquista.  ¿Y todo por qué?  Porque se nos ha convencido (cosa que nunca hemos analizado) de que TENEMOS LA OBLIGACIÓN de escribir “correctamente” nuestra lengua, de acuerdo con las reglas ortográficas de España.  Y los más feroces custodios de esta aberración, son los maestros de español y la escuela en general, que viven ponderando las virtudes del “dominio de la lengua de Cervantes”.  Conocer la gramática y las reglas ortográficas es la gran maravilla.  Y así, sin pensarlo, seguimos siendo vasallos de un colonialismo cultural que hace siglos debimos mandar a la porra.  ¿Por qué debemos ser defensores de la pureza de la lengua castellana?  ¿Acaso somos españoles?  Esa es tarea de ellos, no nuestra.
Los ameriñoles TENEMOS LA OBLIGACIÓN de escribir como hablamos: en AMERIÑOL. Y escribir en Ameriñol, de acuerdo con los sonidos que emitimos, es de lo más fácil.  Solo tenemos que dejarnos llevar por el oído: “SE-SE-SION”.  No hay problema.  Porque la C no tiene para nosotros ese sonido que le dan los españoles cuando ponen la punta de la lengua detrás de los dientes superiores.  Para ellos es fácil escribir CeCilia, pero para nosotros que pronunciamos SeSilia, es un enigma que nos obliga a “aprender de memoria” la palabra Cecilia, y todas las demás de ese tipo.  Y si pronunciamos SESILIA, por qué diablos tenemos que escribir CeCilia?  Es un disparate, una arbitrariedad a la que nos hemos sumado en forma entusiasta.  En primera línea, los maestros y profesores de Español; y después, la inmensa masa de “intelectuales” con la pretensión de ser “buenos escritores”, lo que supone un dominio aceptable o bueno de las reglas gramaticales y ortográficas.  Idioteces que solo sirven para pavonearse y presumir ante aquellos que “hablan mal y escriben peor”. 
Ni siquiera tienen que leer mi libro “El Ameriñol”.  Para escribir perfectamente nuestro idioma, el Ameriñol, solo tienen que acordarse de unas cuantas reglas que caben en una página, como lo demostraremos a continuación:
Se eliminan del Ameriñol siete letras innecesarias:   K-H-Ll-V-W-X-Z
Se le quita a la C las funciones de S que ha venido usurpando en nuestro modo de pronunciar.  Su uso se limita a Ca-Co-Cu, Cla, Cru, etc.  NUNCA antes de E o I.   Ni Cielo ni Cedazo.  Solo Sielo y SedaSo. 
En el grupo J-G, se elimina la función de la G antes de E o I.  No escribiremos Gitano ni General.  La G solo se utilizara en Ga-Go-Gu.  Jitano, jeneral.
La Y asume todas las funciones de la eliminada  Ll.   Yegamos, yamamos.
No es preciso escribir M antes de B o P.     Inposible-Inbento-inbesil-enbargo.
Se considera innecesario el uso de la tilde.  No se tildará ninguna palabra.
Se admite toda forma de comunicación  popular como algo aceptable.  Si el pueblo dice: “habemos” está bien.  Si la gente dice: “hubieron muchos heridos”, está bien.  Lo mismo para “habían”  varias personas y otras formas populares que la prosodia y ortografía han estigmatizado.  Si el pueblo lo usa como término de comunicación, es válido para el Ameriñol.
No se considera ninguna palabra extranjera como barbarismo.  Todo lo que sirva y exprese con claridad cualquier idea, tiene carta de nacionalidad en el Ameriñol, como: brassier, chef, negligé, sangrón, igualada y la infinidad de términos que provienen de la ciencia, la cibernética y otras a las que la Academia NO ACEPTA, porque se jode “la pureza” del idioma español.  Con solo eso que hemos puesto aquí, será suficiente para que todo el mundo escriba bien, de acuerdo con nuestra forma de hablar.  Para aquellos que deseen saber la justificación de estas y otras decisiones de “El Ameriñol”, pueden encontrarlas en el libro.  ¿Se imaginan ustedes que una palabra como BRASSIER o brasier, no se encuentra en el DRAE porque este tiene unas alternativas difusas como SOSTÉN o TALLADOR?  Sostén es cualquier cosa que “sostiene”, lo que sea; tallador es lo que o el que talla.  Pero BRASSIER ES INCONFUNDIBLE.  Sin embargo, la Academia NO LO ACEPTA.  Y hasta hace muy poco, se negaba obcecadamente a admitir la palabra CHEF, cuyo significado es universal.  ¿Y qué me dicen de la dulce, provocativa y sensual NEGLIGÉ para cuya sustitución la Academia nos propone dos nombres absolutamente vulgares y faltos del encanto de aquella: BATA y CAMISÓN DE DORMIR.  ¿Qué les pasa a esos tipos?  ¿Pueden imaginarse semejante dislate?  ¿Cómo se atreven a comparar o igualar a la chic “negligé” con el burdo camisón de dormir?  ¿Están locos?  Eso sería como el intento de sustituir “la crême de la crême”  por  “la tapa del perol”. 
Nosotros somos americanos y NO tenemos que cargar con las fobias hispanas en cuanto al idioma; que ellos odien los galicismos porque envidian a los franceses, es su problema.  Pero para nosotros: “Vive la France con negligé”.    A los Ameriñoles, como a los gringos, nos debe valer madre el origen de las palabras; no nos importa que sean chinas, marcianas, rusas o toltecas; si sirven al objetivo único de la lengua, bienvenidas sean.  No tenemos por qué ser puristas y seguir siendo lo que hemos sido por espacio de cinco siglos: cancerberos oficiosos de algo que NO NOS INCUMBRE.  Tenemos que sacudirnos el último lazo colonial que, como a los negros manumitidos de Norteamérica, nos mantiene pendientes de lo que decidan en cuestiones lingüísticas, los amitos blancos del otro lado del Atlántico.  Es cierto que no podemos sustituir el idioma español, pero NO TENEMOS por qué seguir torturándonos con reglas válidas para los iberos y su fonética, pero NO para nosotros.
Ameriñolescamente:      Ricardo Izaguirre S.
                                   
Blog “Librería en Red”     http://libreriaenred2010.blogspot.com/    
Blog “LA CHISPA”             http://lachispa2010.blogspot.com/

  


sábado, 26 de mayo de 2012

966 Lenguaje simbólico


966    “LA CHISPA          15 mayo 2012
Lema: “En la indolencia cívica del ciudadano, se fundamentan los abusos del Poder”
LENGUAJE SIMBÓLICO     
         Por más que hayamos refinado el lenguaje en busca de una forma de expresión clara, este sigue siendo confuso y con significado diferente según las experiencias, cultura y carácter de las personas.  Es para paliar eso que cada idioma debe ser breve, conciso y lo más simple posible para que llegue a adquirir una validez simbólica e inequívoca.  Pero para que esto sea posible en la mayor medida, es necesario que las herramientas de comunicación sean lo más sencillas posible.  La grafía, como medio de preservación y testimonio de la palabra, tiene que ser diseñada para simplificar la transmisión del pensamiento, y no debe prestarse para la interpretación personal, la cual depende de las muchas variables e intereses que tenga cada individuo.  Una escritura compleja resulta un estorbo; demasiadas reglas en la expresión, también entorpecen el intercambio.  Es bueno que haya un conjunto básico de preceptos que sirvan de guía, pero solo para mejorar y hacer más eficiente la COMUNICACIÓN.  Sin embargo, esas normas deben ser casi invisibles, pues en eso consiste una gramática eficiente, en difuminarse en el interés primordial del habla. El problema surge cuando los elementos que solo deben servir de apoyo, adquieren papel protagónico a tal grado que todo el esfuerzo se centra en estos utensilios que llenan de trampas la expresión escrita.
         Si en el intento de conectarnos, la complejidad de los sonidos o la maraña gramatical y ortográfica se convierten en el punto focal, se desdibuja el objetivo único de todo idioma: ponernos en contacto. Claro que en esto hay mil imponderables que siempre producen errores de interpretación entre el emisor y el receptor; pero para vadear esa dificultad inherente a todo lenguaje, las causas de problemas deben ser reducidas al máximo mediante la simplificación.  Eso es lo que se hace en el mundo de la cibernética y en la propuesta del Ameriñol.  Tanta regla y norma solo obscurece el panorama y no ayuda en nada. 
Y en el habla NUNCA se debe perder de vista el simbolismo, esto es, el significado emocional que los vocablos tienen para cada uno de nosotros. Vean que NO se trata del valor lógico de estos sino del emocional.  Y este varía según las experiencias de cada uno.  El término AMOR, aparentemente unívoco, puede tener diversas significaciones según la emotividad de cada uno.  Es por eso que la SENCILLEZ es necesaria en toda forma de expresión (oral y escrita), porque incluso en los conceptos más simples y conocidos, es posible la mala interpretación que oscurece el vidrio y dificulta el entendimiento.  Cuando los instrumentos de contacto son demasiado complejos y engorrosos, se convierten en un lastre que demanda demasiado esfuerzo del usuario, a tal punto que, por cuidarse de la corrección de la forma, olvida o descuida el objetivo primordial de estos: la claridad en la transmisión de las ideas.
         Los “idiomas” cibernéticos se están adelantando al oral, debido al enfoque científico que hacen de la simbología; en los ordenadores NO se toma en cuenta la vanidad de nadie, las viejas querencias ni las reglas gramaticales, sino que toda la atención se fija en la rapidez y exactitud del lenguaje.  Todo se ajusta a la meta.  Incluso se ha inventado un vocabulario que se aplica sin respeto alguno por las “normas gramaticales”: chatear, zapinear, accesar son vocablos que tienen un significado preciso e inequívoco, aunque sean barbarismos según las Academias.   Pero son de utilidad extraordinaria y de practicidad inigualable, ya que sin importar las cuestiones formales, se concentran en el objetivo de toda forma de expresión: ENTENDERNOS.  Aunque nos desagrade (por acato ciego de la tradición), todos sabemos qué significa “zapinear”, híbrido horrendo, pero que no tiene un equivalente en español, porque la ortodoxia no lo acepta y nunca lo hará.  El “gramaticalismo” nos convierte en delincuentes cuando usamos el ordenador.  Pero la practicidad de la cibernética es un atractivo irresistible.
         Toda la ciencia  apunta hacia la simplificación, y para eso, necesita un método simbólico inequívoco y rápido, sin políticos del idioma, sin asambleas legislativas de la lengua.  La idea es que dentro de muy poco, sea posible insertar monstruosas cantidades de información en un pequeño paquete electrónico, sin trabas ni reglas gramaticales que puedan entorpecer la marcha victoriosa y aplastante del imparable 010101.
        Ese es también el objetivo del Ameriñol: simplificar la comunicación en nuestro idioma.  Independizarnos del tutelaje hispano y lograr el desarrollo sin quedarnos enredados en un reglamentarismo anacrónico, que demanda para que utilicemos el español “correctamente”, por lo menos 20 años de estudio con dedicación plena.  Y los latinos NO TENEMOS tanto tiempo para desperdiciar.  Esa es la propuesta lógica de “El Ameriñol”, el atajo que debemos tomar para alcanzar, a la brevedad posible, el gran objetivo de la EDUCACIÓN.  Pero mientras la escuela persista en hacernos escribir Zapato, estaremos jodidos.  Quedaremos trabados en una tarea absurda e interminable; pero lo que es peor: sin valor alguno que compense el sacrificio.  El Ameriñol nos ofrece la salida fácil y práctica a un problema estúpido que nos han impuesto durante 500 años.
         “Zapinescamente”             
                                            Ricardo Izaguirre S-
 (Utilice el Ameriñol, es de lo más fácil)
                                      
Blog “LA CHISPA”                  http://lachispa2010.blogspot.com/


jueves, 24 de mayo de 2012

971 Respuesta a un funcionario


971    “LA CHISPA                  23 mayo 2012
Lema: “En la indolencia cívica del ciudadano, se fundamentan los abusos del Poder”
RESPUESTA A UN FUNCIONARIO DEL SERVICIO CIVIL
        Como nunca he querido “personalizar” a este periodiquito, no suelo responder de esa forma a los que me hacen alguna crítica.  Mi intención es que focalicen sus preguntas y método inquisitivo en los problemas que denuncio y que son de la incumbencia de todos.  Nada personal, pero sí del interés de todos.  Como es o debiera ser la política.  Pero en este caso voy a hacer una excepción por algunas razones que cuadran muy bien con “La Chispa” que dio origen a la protesta de este caballero llamado Luis Carlos Murillo, y que es funcionario del Servicio Civil.  “ANALISTA DE RECURSOS HUMANOS”, dice el pie de página de su artículo.  Como empleado de esa entidad, comprendo su oficiosa manera de defenderla, aunque eso no le da derecho a hacer suposiciones o endilgarme cosas que no he dicho en ningún momento.  Su ANÁLISIS de mi “Chispa”  # 968, titulada “El poder de nombramiento” se encuentra en mi blog para que todo el mundo pueda leerla y comprobar si lo que digo en ella es falso o verdadero  O si es tan despistada como este señor pretende que lo es.  Además, si lo que afirma el señor Murillo, se desprende del texto de mi nota. Tampoco se trata de un Troll anónimo, pues va con mi firma, dirección de correo y está en mi blog.      Inicia su análisis diciendo:
 “Hola Félix, por lo que leí en el periódico La Nación, este parece ser uno de esos correos llamados troll cibernético, que lo que buscan es ofender, sin ningún argumento sustentable”. 
         No sé a qué correo se refiere, pero si salió en La Nación, NO se trata de mi “Chispa”; pero si así fuera, puedo asegurarle que no fue escrita con el deseo de OFENDER.  Eso no tiene sentido alguno para mí, aunque sí es de mi interés causar roncha entre las personas que se sientan aludidas.  Además, concitar la atención de aquellos ciudadanos que, por diversas razones, no suelen observar más allá de la epidermis de las funciones del Estado.  Don Luis Carlos: en la función pública NADIE se siente ofendido, pues todos se creen héroes honestos al servicio incondicional de la Patria; y los que criticamos, solo somos unos enchilados egoístas incapaces de mejorar su excelsa obra.  Y muchos de ellos se lo creen.  No sé en qué categoría está usted al hacer una defensa de oficio del Servicio Civil, ponderándolo como una institución casi perfecta.  Sin embargo, lo entiendo y disculpo por ese intento.  Lo que no puedo admitir es que usted insinúe en forma maliciosa, que yo solo tengo la intención de ofender; y “sin ningún argumentos sustentable”.
        También dice usted: “El autor de este correo, si es que hay alguno”.   Claro que sí lo hay, me llamo Ricardo Izaguirre S., tengo un blog en donde publico bajo mi nombre y, también les envío mis “Chispas” a sus correos particulares a un selecto grupo de personas, y que incluye un numeroso conjunto de embajadas acreditadas aquí en Costa Rica.  Todas con mi nombre y correo electrónico.  Para hacer una crítica al Estado, NO necesito el camuflaje del anonimato; además, formular objeciones a la administración, es no solo un derecho del ciudadano sino UN DEBER IRRENUNCIABLE.  Y los funcionarios aludidos no deben recurrir a la “descalificación” de los ciudadanos como elemento intimidatorio para evitar la censura razonable o, por lo menos sospechosa.  ¿Se acuerda de la Glasnost?  El silencio es la complicidad suicida y criminal de los pueblos ante los abusos del Poder.
         Si usted, como ANALISTA, observa el espíritu de mi nota, se dará cuenta de que soy un profundo admirador del Servicio Civil; no del de Costa Rica, México o algún país en particular, sino de la filosofía que sustenta la creación de ese ente regulador.  Soy un ferviente fan de esta INSTITUCIÓN en su plano ideal; pero eso no significa que desconozca cuáles son las características reales de esa oficina contralora en nuestro medio.  Y a usted como empleado de ella, no tengo que explicarle las diferencias entre la teoría y la realidad de su modus operandi.  Usted, como don Félix, saben muy bien las carencias y limitaciones que tiene el Servicio Civil para realizar una función mucho más efectiva.  Y usted sabe que todas ellas son POLÍTICAS, incluyendo al Director General quien es nombrado directamente por el Presidente de la República (Estatuto del S.C. capítulo II, artículo 8°); es decir, es un “empleado de confianza” que tiene que ser dócil, o le cortan el rabo. 
He conocido al S.C. desde que se fundó y tengo bastante información de cómo funciona, y no como usted dice en su nota.  Incluso he sido víctima de este sistema.  En su carta usted sugiere al lector lo que yo NUNCA he dicho.  Afirma usted:
“El autor de este correo, si es que hay alguno, presenta un gran desconocimiento del Régimen de Servicio Civil, o bien, el autor se refiere al Servicio Civil de otro país.
“Si no fuera así, sabría que los diplomáticos no los nombra el Servicio Civil (ni los diputados, ni los ministros, ni los asesores)”.
        De esa afirmación se desprende que yo he sugerido o dicho que los embajadores, diputados, ministros y asesores son nombrados por el Servicio Civil.  Jamás he afirmado semejante disparate.  Y si usted vuelve a leer mi nota sin subjetividad, verá que tengo razón.  Es más, en mi “Chispa” digo que el Servicio Civil NO NOMBRA A NADIE.  Que solo se dedica a hacer ternas porque la Ley solo eso le permite, ya que en última instancia, son “los jefes de confianza” los que realizan el paso final.  Es ahí donde está lo malo, el peligro y la deficiencia de ese organismo.  Porque una vez hecha la terna, se desentiende del resultado final, en donde intervienen una serie de imponderables de tipo personal (políticos también) que son los que hacen posible la burla que se les hace a los “mejores”, a los terneados.  Caso del NO nombramiento del primero de la terna.  Lo cual se repite y se repite, de manera tan evidente, que el Estatuto incorporó un artículo que dice que el ministro o jefe de personal DEBE EXPLICAR ante el S.C. la razón por la cual no ha sido nombrado ese aspirante (Capítulo V, versículo 27 “Selección de personal”) Eso es todo lo que se le pide al “jefe de confianza”.  ¿Qué hace el Servicio Civil con la “explicación” del jefe de personal?  ¿Se ordena el nombramiento del perjudicado?  ¿Se hace este requerimiento de oficio?  ¿O solo es letra en el papel?  ¿Conoce usted, don Luis Carlos, algún caso en donde a raíz de esta circunstancia se haya nombrado a ese aspirante por gestión del Servicio Civil?  Sabemos que en estos casos, la víctima nada puede alegar puesto que como NO ha sido nombrado en la plaza, NO ESTÁ CUBIERTO NI PROTEGIDO POR EL Servicio Civil.  ¿No es así?  Cuando el Servicio Civil presenta la terna, finaliza su papel, y el aspirante a funcionario queda librado a su suerte y a la simpatía de los “jefes de confianza”. A los vaivenes de la política.   Esa es la dolorosa verdad, aunque usted crea otra cosa.  O intente hacer creer algo diferente.
        Mi tesis siempre ha sido que los nombramientos de funcionarios DEBEN SER HECHOS directamente por el Servicio Civil, con base a los atestados que presenta cada candidato, y NO COMO UN CONCURSO DE SIMPATÍAS al que es sometido este en las respectivas dependencias del Estado.  Al capricho de un “jefe de confianza”, que bien puede ser un mediocre incompetente.   Soy partidario de un Servicio Civil poderoso, independiente, sano, apolítico.  Que no se base en los colores políticos del aspirante; o en su aspecto físico.  Como ve, soy un fanático del Servicio Civil, y no lo que usted insinúa en su nota.  Y le doy la razón a lo que escribió en su carta: el Servicio Civil que yo anhelo es MUY DISTINTO DEL QUE USTED CONOCE.
        Usted sabe muy bien que entre la formalidad que ustedes cumplen en la elaboración de ternas y el resultado final de un nombramiento, existe una enorme penumbra en donde intervienen toda clase de factores ajenos a la intención primitiva de la selección de personal de manera técnica y apolítica.  Usted lo sabe muy bien.  No le pido que lo admita públicamente, pero usted sabe que eso que le digo es cierto.  El jueguito de los INTERINOS también es harto conocido, y no es que estos sean nombrados por cuatro años, sino que pueden estar los cuatro años (o más) en el puesto mediante la maniobra de la no aprobación del candidato que ha pasado los tres meses de prueba. Cualquiera de esos jefes esgrime el argumento más bellaco para justificar su veto al empleado “a prueba”; y usted debería saberlo muy bien.  Muchas personas me han escrito contándome sus casos, los cuales corresponden a lo que yo digo en mi denuncia: gente que pasó los tres meses de prueba y luego fue echada por los “jefes de confianza” bajo los pretextos más increíbles. 
        He estado muy cercano en la danza de los nombramientos de personal diplomático, y sé que estos están cubiertos por el Estatuto de Servicio Exterior.  JAMÁS dije en mi “Chispa” que estos son nombrados por el Servicio Civil; si usted la lee con cuidado y sin exaltación, verá que así es.  Es cierto que menciono en el contexto el asunto del nombramiento de esta gente, pero NUNCA dije que lo hiciera su oficina de trabajo.  Esa es una insinuación maliciosa con la que intenta usted desautorizarme, es decir, ponerme como un ignorante cuya opinión vale nada porque no sabe nada del Servicio Civil.  Esa es una técnica muy vieja y manida de cierto partido político, mejor dicho, de los políticos.   
        Don Luis Carlos, le sugiero que vuelva a leer mi “Chispa” con serenidad, y verá que NO estoy en contra de esa institución, sino todo lo contrario.  Y otra cosita para terminar: me gustaría que le explicara a don Félix Ortega Espinoza (la persona que le informó sobre mi artículo) por qué continúa como INTERINO en las oficinas del Servicio Civil después de tantos años de trabajo; asunto que lo ha conducido a tener serias dudas sobre su idoneidad para el puesto.  Aclárele cómo es eso posible.  Y también yo le pido que me diga cómo es dable que alguien así, tenga una explicación tan linda y casi cándida de las razones que tiene el Servicio Civil para NO HABERLO NOMBRADO EN PROPIEDAD después de tantos años de servicio, tal como consta en la notita que le envió a usted.  La reproduzco sin tocar su ortografía.  Solo le agregué colores y subrayado.
Felix Ortega Espinoza       FelixOE@pgr.go.cr
15:28 (hace 19 horas)
https://mail.google.com/mail/images/cleardot.gif

https://mail.google.com/mail/images/cleardot.gif
https://mail.google.com/mail/images/cleardot.gif
para Luis, mí
https://mail.google.com/mail/images/cleardot.gif
Jaja eso Luis, a si es defienda esa gran institución que nos tiene a muchos interinos en cierta incertidumbre de que si somos o no idóneos para ocupar un puesto que por muchos años estamos trabajando, pero yo entiendo que no es culpa de el SC ya frenado que esta con la falta de buenos sistemas de evaluación automática y de personal, a demás que algunas instituciones no colaboran en la depuración de sus bases de datos de plazas vacantes, me parece muy bien y atinado tu comentario ya que conoces y sabes que en la realidad no es a si como dice este señor.
 Saludos,
Félix
        Lo invito a que lea mi blog “LA CHISPA”      http://lachispa2010.blogspot.com/
        Con todo respeto
                              Ricardo Izaguirre S.            Correo electrónico:   rhizaguirre@gmail.com

                                     

martes, 22 de mayo de 2012

968 El "Poder de Nombramiento"


968    “LA CHISPA              (17 mayo 2012)
Lema: “En la indolencia  cívica del ciudadano, se fundamentan los abusos del Poder”
EL PODER DE “NOMBRAMIENTO”
         Esta facultad en manos de los políticos, los ubica tan solo a dos milímetros por debajo de Dios… o en igualdad de condiciones. El “Poder de Nombramiento”, es el arma del juicio final, y les da a los que lo poseen, dominio absoluto sobre la voluntad y consciencia de aquellos que han sido nombrados mediante este vergonzoso procedimiento, que reduce el servicio público a una rebatiña que siempre termina en manos de ineptos.  Y esa es la gran tragedia de nuestros pueblos: políticos inútiles y torpes que, además, tienen la facultad de nombrar a otros inútiles lambiscones incapaces de hacerles el menor señalamiento u objeción en cuanto a las DEFICIENCIAS de su labor; es decir, alcahuetes.  En todo el mundo conocido, donde hay preocupación por la EFICIENCIA del Gobierno, se ha creado un organismo denominado SERVICIO CIVIL, cuya finalidad es la modernización de la Administración Pública, al dotar a esta del personal idóneo para el mejor aprovechamiento de los recursos de un país.  Esto significa, en teoría, que esta oficina gubernamental tiene la potestad de nombrar a los más capaces servidores.  La modernización y eficiencia del Estado implica la profesionalización de todos sus componentes.  Así, el que pretende convertirse en burócrata, sabe que tiene la certeza de que sus méritos profesionales serán la base para su nombramiento. Que puede invertir cinco años de estudio en una carrera porque tiene la seguridad de que será nombrado por sus méritos profesionales y no por “palancas”, que es la modalidad en nuestros medios, en donde cualquier idiota es nombrado EMBAJADOR o diplomático sin que sepa un carajo de diplomacia.  El ideal es que el funcionario sepa que no depende del capricho o de las simpatías personales sino de su capacidad y formación, lo cual es un gran estímulo para continuar estudiando y perfeccionándose en la carrera pública.  Además, este trabajador está dotado de inamovilidad (plaza en propiedad) lo cual le da gran seguridad personal.  Pero esta combinación (capacidad y seguridad)  es un peligro en la miasma de nuestra política.  Un empleado bien preparado y que tenga su plaza en propiedad, es alguien que puede mantener su verticalidad sin caer en el servilismo; en síntesis, es un “peligro político”, porque no es un agachado.  
En nuestros medios el Servicio Civil es uno de los tantos órganos (controles) que han sido castrados “legalmente” para que solo sirvan de pantalla y hagan creer que el personal del gobierno está integrado por gente capaz, “nombrada por el Servicio Civil”, de acuerdo con sus méritos y experiencia profesional; pero eso no es cierto, no totalmente.  El Servicio Civil es una criatura que nació muerta, pues dadas las limitaciones que tiene, solo es una pantalla para darle ciertos visos de legalidad al sistema oficial de nombramientos por dedo.  Con la creación del “poder de nombramiento” y el concepto de “Puestos de Confianza”, se liquidó el asunto; y el Servicio Civil pasó a ser solo un ente burocrático que está ahí para justificar todas las arbitrariedades laborales que se realizan en la función pública.  Todos los ministerios, todos los departamentos, todas las oficinas, están dirigidas por “empleados de confianza”, lo que significa: por compinches, miembros del partido, parientes y toda clase de reptiles dispuestos a tapar y disimular los desafueros de las jefaturas de confianza. El Servicio Civil NO NOMBRA A NADIE; solo elabora ternas para que, según el jefe de “confianza”, se nombre a esta persona por un “período de prueba” que, casi siempre termina en el rechazo del aspirante.  Y luego de esa maniobra, se vuelve a emplear, como INTERINO, al mismo mediocre que ocupaba el puesto antes de que este fuera incluido en el Servicio Civil.  Y así, este servil del partido, sigue durante los cuatro años de la administración.  De esa manera se burla el derecho de aquellos que se GANARON el privilegio de ser incluidos en una terna.
La inmensa mayoría de los funcionarios son incompetentes nombrados políticamente, y los únicos atributos que se les pide es la capacidad de hacer genuflexiones y curvar la espalda; además, la disposición a la deshonra y el sometimiento a la ley del silencio ante los desmanes de sus jefes.  Esa es la raíz del mal funcionamiento del Estado.  No es cuestión de reformas constitucionales o creación de más burocracia, como la Sala Cuarta o Tribunales de Ética.  Se trata de honestidad e idoneidad, palabras que causan escalofríos en los círculos políticos.  A NADIE EN EL GOBIERNO LE INTERESA LA CALIDAD DEL FUNCIONARIO ni los buenos atributos que este pueda tener.  Lo único que se le exige es que su conducta sea lo más perruna posible.  Tres son los requisitos reales para ingresar al servicio del estado: estar emparentado biológicamente con las loras (capacidad “trepadora”), con los perros (capacidad lambiscona) y con las lagartijas (capacidad de reptar).  Además de pertenecer al partido en el poder y tener las conocidas “palancas”.  Así, pues, que lo que menos interesa a los jefes y jefecillos de los entes estatales, es que los nombramientos de servidores sean realizados por una institución especializada que solo considere los méritos profesionales y personales del aspirante a determinado puesto. 
         Pero a los políticos, mediocres en su inmensa mayoría, no les interesa que sus subalternos o encargados del control de la gestión pública, se encuentre en manos de gente que piense y que sea capaz de cuestionar o exigir rectitud, decencia y honestidad en las acciones del gobierno.  Un funcionario vertical y con capacidad para pensar, es un “problema”.  Las jefaturas lo que quieren son lameculos dispuestos a plegarse a cualquier orden, sin considerar la legalidad o la decencia de las acciones que les encomienden los jerarcas.  Es por eso que prefieren tener INTERINOS.  Y todos sabemos lo que eso significa; el interino es una persona presa del miedo a quedarse sin trabajo de la noche a la mañana; es alguien víctima de las veleidades de sus jefes y, para tenerlos de su parte, tiene que ser capaz de arrastrarse como gusano siguiendo sin chistar, las órdenes que le den.  Los interinos suelen ser serviles de lo peor (con alguna razón), pues su empleo depende del capricho de sus jefes.  Esta es una situación miserable que condujo a la creación del Servicio Civil, una institución que garantizaa no solo la idoneidad del personal, sino la SEGURIDAD LABORAL de este (la “propiedad” del puesto).  Pero un empleado COMPETENTE Y EN PROPIEDAD, resulta una “amenaza” para cualquier jefe mediocre que pretenda tener vasallos que se plieguen a sus antojos y que, además, le cubran sus chanchullos.  Por eso se crearon los llamados “PUESTOS DE CONFIANZA”; para contrarrestar la rectitud del Servicio Civil.  De esa manera, cualquier inepto rufián, con solo ser miembro del partido en el Poder, puede gozar de puestos elevados y complejos de cuyo funcionamiento y responsabilidades NADA SABE. 
         En teoría, la corrección de esos males institucionales fue lo que dio origen a la creación del Servicio Civil de Costa Rica en mayo de 1953.  Pero recuerden que los “NOMBRAMIENTOS” siempre han sido un arma política de primer orden.  Ella posibilita el nepotismo y poner a los amigotes en los puestos clave del régimen, sin importar que sepan un carajo de la materia de la cual están a cargo (para eso están los “asesores”).  Así que desde el mismo inicio de esta institución topó con la reticencia de los que tienen la sartén por las orejas, que veían en este órgano, una limitación a su poder de “nombramiento”.  Así que la ley del Servicio Civil fue diseñada de manera tan cuidadosa que, de ningún modo, cercenara “el poder de nombramiento” de los políticos, sin importar que esto incidiera en la pobre calidad de los servidores públicos.  Recuerden que desde 1945 el Lic. Oscar Barahona Streber escribió un proyecto de ley que contemplaba la creación del Servicio Civil con una gran finalidad: 
El objetivo primordial de esta Ley y de sus Reglamentos es establecer una Administración Pública técnica, eficiente, depurada y económica regulando los derechos y obligaciones, con ocasión del trabajo, de todos los trabajadores que estén directamente al servicio del Poder Ejecutivo o de las Municipalidades, o de entidades u organismos dependientes de o estrechamente relacionados con aquél o con éstas".
        Ese ha sido siempre el principal objetivo del servicio civil: liberar a la función pública de la influencia politiquera; además, lograr la eficiencia y capacidad de servicio que el ciudadano demanda del gobierno.  Pero todo eso ha sido hábilmente bloqueado en la Ley del Servicio Civil, la cual se encuentra llena de una hojarasca que no permite ver con claridad el trasfondo de la ley.  Son esos portillos los que han dado al traste con el objetivo primordial de este órgano, pues el verdadero “poder de nombramiento” continúa en manos de los políticos, y la Administración Pública sigue siendo una fiesta de influencias y palancas al servicio de esa clase parasitaria.  Los mastines de esa jauría, JAMÁS soltarán el hueso.  Darle plenos poderes al SERVICIO CIVIL para que cumpla sus funciones primigenias, sería una verdadera Reforma Estatal.
         Serviciocivilescamente                     (¿Cómo funciona esto en sus países?)
                       RIS           Correo:  rhizaguirre@gmail.com
Blog “Librería en Red”          http://libreriaenred2010.blogspot.com/

        
                                                                                                   

lunes, 21 de mayo de 2012

963 ¿Por que utilisar El Ameriñol?


963  “LA CHISPA    (en Ameriñol)    (12 mayo 20102)                

Lema: “En la indolensia sibica del siudadano, se fundamentan los abusos del Poder”

¿POR QUE UTILISAR EL AMERIÑOL?
          
           Aclaremos: el Ameriñol es casi lo mismo que el español ablado; pero con tremendas diferensias cuando se trata de escribirlo.  Cuando escuchamos a un cubano, hondureño, argentino, español o tico, sabemos que estan conbersando en español; con sus caracteristicas rejionales que nos permiten saber su nasionalidad, pero todos nos entendemos y sabemos que estamos ablando en Español o Ameriñol.   Y asta ai no ay problema; el lio se forma (para nosotros) cuando ay que escribir esta lengua bajo las reglas ortograficas de los españoles, lo cual nos obliga al dominio de dos lenguas: una ablada que es casi igual al español de España, y otra escrita, que difiere de nuestra manera de pronunsiar.   La ortografía del español a sido diseñada para representar muchos sonidos que los natibos de España suelen emitir y que se representan con determinadas letras.  Pero resulta que esos fonemas ispanicos no ecsisten en el español de America.  No ay correspondensia entre siertos fonemas españoles y la forma como ablamos aqui.  Y eso se refleja en la escritura en una notable desbentaja para los ameriñoles.  No ay un sonido para la letra Z en Ameriñol.  Asi que estamos obligados a aprendernos DE MEMORIA TODAS LAS PALABRAS QUE SE ESCRIBEN CON ESA LETRA.  Y eso no es justo.
Si a un grupo de españoles se les ase un dictado de palabras con esa letra, eyos no tienen dificultad para escribirlas pues quien se las dicte dira: Zapato, ZarZa, Zanahoria, cabeZa, iZar, caZa, etc.  Mientras que si el grupo esta conpuesto por americanos, la persona que aga el dictado les dira: Sapato, SarSa, Sanahoria, cabeSa, iSar, caSa, etc.  Esto sinnifica que debemos plegarnos a una forma de escribir NO diseñada para nuestra manera de ablar, y eso NO TIENE SENTIDO ALGUNO.  Es una locura, pues si digo Sapato, tengo que escribir Sapato y no Zapato.  ¿Por que debo utilisar una letra cuyo sonido no se encuentra en mi repertorio fonético?  Esa es una arbitrariedad deribada de nuestra actitud serbil asia la Academia española de la lengua.  La tesis del Ameriñol es que nosotros TENEMOS QUE ESCRIBIR COMO ABLAMOS.   Eso es todo.  Nadie puede obligarnos, si no queremos, a escribir bajo las reglas de los españoles.  Nosotros somos mas o menos QUINIENTOS MIYONES de ablantes, mientras que eyos con costo yegan a los cuarenta.   Recuerden que la lengua solo tiene un objetibo: COMUNICARNOS.  No se trata de dominar miles de reglas y preseptos sino de aser posible entendernos. 
         La S es nuestra Z, y es por eso que el Ameriñol propone que junto otras seis, sea eliminada de nuestra escritura.  Las otras son la X, W, V, Ll, K, H (en su funsion de letra muda).  En mi libro “El Ameriñol” espongo las rasones para esa determinasion.  Todas las modificasiones son de sentido comun y nadie puede contradesirlas con argumentos que no esten fundamentados en la TRADISION, el respeto a la lengua madre y otras “justificasiones” que solo indican el temor ante el canbio nesesario.   Bean que TODAS las “reglas” que demanda “El Ameriñol” para escribir correctamente nuestro idioma, caben en menos de media pajina.  Saber eso, es todo lo que ase falta para escribir a la perfecsion.  Entonses, ¿que es lo que nos inpide aseptar al Ameriñol?  Recuerden que nadie nos puede regañar o “aplasar”; si siquiera en el colejio, si formamos la mayoria o la totalidad de los escribientes en esa forma.  Si este mensaje yega a los jobenes, estoy seguro de que lo acojeran con entusiasmo, pues representa la liberasion de algo con lo que nos an torturado desde la escuela: la ortografia.  Una ortografia absurda y antinatural para nosotros.  Como digo en mi libro, no ay quien no recuerde con rencor y miedo, aqueyos orribles momentos de los famosos “dictados”, o la conjugasion berbal: yo tengo, tu tienes, el tiene, nosotros tenemos, eyos tienen, bosotros teneis.  Aunque nadie en America diga TENEIS.  O mucho menos, bosotros.   Y ni que desir de los que ablamos en “bos”.
         El problema con los adultos parese ser de banidad, apego y tradision.   No ay intelectual,  escritor o profesional que  no se sienta orguyoso del “dominio” que tiene sobre “la lengua de Serbantes”, y de blasonar cuantos titulos tiene, cuantos libros a escrito y cuanta gramatica domina.  Estas personas sienten que de acojerse al Ameriñol, estaran perdiendo una larguisima carrera de estudios que les da sierto prestijio en los sirculos intelectuales.  Y de ai su retisensia.  Si de repente todo el mundo escribiera bien, como susedera con el Ameriñol, estas personas piensan que perderian toda una bida de estudios y dedicasion; y eso los asusta.  A los Sumos Saserdotes de la lengua les pasa lo mismo que a los de las relijiones: si desaparesiera el misterio, perderian su poder y capasidad para atemorisar a los creyentes.  Un gramatico que no pueda estar corrijiendo a los demas, debe sentirse inutil e infelis.  Pero esa es una perspectiba muy estrecha de lo que es el lenguaje, y es considerar que la eliminasion de dificultades y sinplificasion de la lengua, es algo que no debiera produsirse.  Que el misterio debe prebaleser y que solo aqueyos que an dedicado muchos años al estudio de la gramatica, tienen derecho a escribir con correcsion.   El Ameriñol es la yabe asia ese mundo de libertad idiomatica, sin restricsiones ni reglamentarismo ecsajerado.  Incluso pueden adoptarlo poco a poco, cometiendo “españolismos” (errores) que, con el correr del tienpo, iran desaparesiendo de nuestra forma de escribir.
         No le tengan miedo, pues nadie puede aserles nada porque lo utilisen; a lo sumo, pueden pensar que son algo ignorantes de la ortografia, eso es todo; pero luego beran el enorme repertorio de bentajas que tiene la utilisasion de este sistema que nos permite escribir sin temor a cometer errores “enjendrados” al otro lado del Atlantico, en una casa de los sustos yamada Academia Española de la Lengua.  Los ameriñoles tenemos la OBLIGASION de escribir como ablamos, NO como lo asen los españoles.  Ese es el punto unico.
         Fraternalmente
                            Ricardo Isaguirre S.                  E-mail:  rhizaguirre@gmail.com
Blog “Libreria en Red”   http://libreriaenred2010.blogspot.com/     (Ogar de “El Ameriñol”)

domingo, 20 de mayo de 2012

965 Los controles del estado


965   “LA CHISPA    (En Ameriñol)      (13 mayo 2012)

Lema: “En la indolensia sibica del siudadano, se fundamentan los abusos del Poder”

LOS CONTROLES DEL ESTADO
         
        Se supone que el Estado debe tener mecanismos automaticos de control de TODAS las actibidades de TODOS los funsionarios, de TODOS los rangos.  En la funsion gubernatiba NO DEBE ECSISTIR la pribasidad ni la inmunidad en cuanto al manejo de fondos e intereses publicos.  Y todo aquel que asepta funjir como funsionario, debe estar dispuesto a someterse a todo tipo de escrutinio aunque no sea sospechoso de nada, ni medie en su contra acusasion alguna.  En la enpresa pribada se sigue esta macsima al pie de la letra.  Incluso se rejistra personalmente a los enpleados cuando terminan sus labores; sobre todo, en aqueyas organisasiones en donde es posible el urto de cosas pequeñas.  Pero en el gobierno, todo el mundo ase lo que le da la gana y se crean fueros espesiales alrededor de infinidad de sujetos en posision de robar, bender influensias, dar asesorias y todo tipo de corruptelas.  Cualquier funsionario de medio pelo, se siente indignado y se considera “ofendido” si le aplican algun control.  Los altos mienbros de los poderes del Estado gosan de una inmunidad de dioses; son deidades que estan mas aya de cualquier demanda de rendision de cuentas.  Presidentes, ministros, diputados, mienbros del Poder Judisial, de instituciones autonomas y otras, no solo yegan a sus despachos cuando les da la gana, sino que estan por ensima de la ley.  Nadie les pide cuentas de nada; por lo tanto, la tentasion para delinquir en cualquier sentido, sienpre esta a tiro de escopeta.
          Y la corrupsion no es solo lo que se roban y el mal uso que asen del tienpo laboral, sino la lejitimasion que an echo de esta conducta inmoral que a yegado a ser la norma en nuestros gobiernos.   La “democrasia formal” tiene todas las institusiones destinadas a belar por la transparensia y el buen uso de los recursos de la nasion.  Una buena “democrasia” republicana y libremente elejida por el pueblo, tiene que contar con todos esos mecanismos de control de la funsion publica.  No faltaba mas.  En todas nuestras republiquitas ay Defensorias del Consumidor, del ciudadano, de los niños, de la mujer agredida, de los perros. Ecsisten ofisinas para todo y para dar la inpresion de que el Estado es un ente perfecto, yeno de controles que garantisan su efisiensia y onestidad en el manejo de “la cosa publica”.  Todos tenemos Sala Cuarta o algo paresido, Contraloria y Procuraduria.  Ademas estan las inefables Asanbleas Legislatibas y los Consejos de Gobierno que rebisan cada acsion y proyecto del Estado.  Y por sobre todo este aparato de onestidad que garantisa la transparensia de las actibidades del gobierno, se encuentra el Presidente o Presidanta que, con mano firme y onesta, es el garante de que todas las cosas marchen como debe o debiera ser.
         Asi, pues, con semejante organisasion de seguridad, ¿como es posible que se de la corrupsion que nos esta aogando?  Y no solo en pequeñeses sino en escala jigantesca.  La respuesta es muy sinple: toda esa mascarada se a diseñado para ser bulnerada a plaser por los politicos y las oligarquias.  Todas esas instituciones son entes castrados “legalmente” para que nada puedan aser; que no tengan poder alguno para actuar en contra de los funsionarios corruptos, ya sea un diputado o el Presidente.  Ni siquiera el Serbisio Sibil se salba de esta lacra, pues todos los nonbramientos en la funsion publica son politicos y mediante palancas.  Los unicos meritos que se piden al candidato a un puesto de gobierno es ser mienbro del partido en el poder, y una abilidad estraordinaria para reptar.  Los otros pergaminos profesionales salen sobrando.  Y si alguien gana un puesto por capasidad, ecsisten mil subterfujios mediante los cuales mantienen el interinato de los amigotes que ya estan enquistados como garrapatas en el aparato burocratico.
         Es sierto que ecsisten esos entes, pero todos an sido emasculados por leyes que les inpide actuar per se ante la corrupsion; para que estos actuen, es nesesario que alguien ponga la denunsia, algo a lo que ningun siudadano se atrebe por dibersas rasones que es innesesario repetir.  Si alguien ba a la Contralora, Procuraduria o Sala Cuarta a denunsiar los desmanes de un diputado, ministro o presidente, ¿saben lo que le puede pasar?  Porque las leyes contra la injuria o la calumnia si son eficases, rapidas y efisientes.  Ayi si se be en acsion el presepto de: “Justisia pronta y cunplida”.  No ay inmunidad para el siudadano que se atrebe a destapar cualquier torta de los funsionarios.  Esto es semejante a aqueya ridicula canpaña publisitaria que nos inbitaba a los siudadanos a “sapear” a los narcotraficantes.  A yamar por telefono y denunsiar a los sospechosos que bieramos en nuestros barrios.  ¿Se imajinan ustedes el riesgo que eso significa?  Y sin enbargo, con esa “sinplesa”, el Estado nos pedia que pusieramos a nuestras familias en semejante riesgo, pues el que atendia el telefono, bien podia ser mienbro del cartel; ademas, tenia nuestro telefono y direcsion.  ¿Que les parese? 
Ay denunsias que solo la prensa ase o puede aser; pero esto solo lo realisan cuando ay intereses de su agrado, o de los dueños del respectibo diario.  O cuando son cuestiones que interesan a la Oligarquia; o bien cuando se trata de cortinas de umo para desbiar la atension del publico.  La restructurasion del Estado en cuanto a los mecanismos de control, es una nesesidad inpostergable; antes de que el pais se nos unda mas en la ignominia, y los gobiernos terminen de perder los ultimos bestijios de credibilidad.  El aparato de control del Estado debe ser una superestructura apolitica, en la que no puedan meter mano los diputados, ministros, presidentes, Sala Cuarta ni nadie mas que los funsionarios responsables de su correcto funsionamiento en benefisio del Estado y la poblasion.  Un ente que aga que el siudadano SIENTA CONFIANSA en el Gobierno.  Y que como el IRS, tenga la potestad de poner fuera del govierno, o en la carsel, a cualquier enpleado delincuente, ya se trate de un conserje o del propio Presidente o presidenta de la Republica.
Controlescamente
                    Ricardo Izaguirre S           E-mail:   rhizaguirre@gmail.com
Blog   “Libreria en Red”   http://libreriaenred2010.blogspot.com/    (Ogar de “El Ameriñol”)